Como libélula de encaje fino color turquesa; voy volando y me descubro escapando de mis recuerdos, escapo porque no quiero más cargar pasados pues hay quien dice que tiene pasados inconclusos pero yo no lo veo ya de ese modo. El pasado es pasado y simplemente se acaba al terminar el día. Uno duerme y el ayer es recuerdo; hoy escapo de ellos porque no quiero seguir siendo más memorias de mi misma. Soy libélula que vuela en busca de horizontes futuros, de emociones distintas, libélula que renace y siente su aleteo libre sin prejuicios y sin cadenas mentales que limitan mis decires y haceres. Amo volar, más por mi propia mente, juntando así los trocitos rotos de mi para convertirlos en recuerdos. No más tristezas en este camino pues de nada serviría haber aprendido a volar y haberme revestido de turquesas. Vuelo y me olvido del tiempo; las escalas del mundo y sus longitudes me tienen sin cuidado alguno. Soy simplemente lo que quiero ser, sin pretensiones ni fundamentos, soy la que soy y con eso me basta. Quitare de mis modos de ser algunos detalles pero mi vuelo es tan interno que todo quedará en meros secretos de mi misma.
Misterio seré, ahora si, pues no me ocupa el que se me sepa, sólo el que se me sienta. vuelo incansablemente sin destino pero con un sentido más propio. Amo ser libélula turquesa y adoro escapar de lo que fui y no seré más... un recuerdo de mi misma.