Homenaje para Aquél que habría cumplido un años más...

Que difícil resulta no tenerte en este mundo, sin embargo, festejo tu ausencia porque tengo la certeza de que ya no querías andar por estos sitios terrenales. Me bebo un tequila, ¿sabes? me heredaste ese gusto y placer por beberlo a diario. ¿Soy alcohólica? no lo sé ¿cuántas veces no te etiquetaron de eso a ti mi querido ? jaja entiendo a la perfección ese placer que te generaba el tener ese elixir de agave en tu lengua, degustarlo pero mejor aún, palparlo como un delicioso elixir divino. Debo confesar que si creo que justo eso te mantuvo tan sano en tantos años, y de modo "ingenuo" hago lo mismo que tú. ¿Sabes qué más intento hacer como tú? tomarme la vida con cierto hedonismo, no me tiro a la parranda (como dicen) no, yo no; pero si me doy mis gustos cualquiera que este sea "para eso trabajo duro" (como dicen) pero en realidad todo cuanto hago, lo hago por los hijos, si, por esos hijos que no tuve y que me permiten ser tan egoísta como me sea posible jaja.  Tú tuviste siete pero la cuarta, esa, si que te hizo sufrir con su muerte previa, esa "canija" (como dirías tú)  se nos fue pero de lo más mágico que hizo fue haberme dado la vida. ¿Qué bien no? sé que justo el haber sido hija de esa cuarta hija tuya, me hizo ser muy querida por ti, además de mi humor tan peculiar que te agradaba. (Herencia de Emma Leiner a mucho orgullo) ¿Recuerdas cuántas horas podíamos conversar? justo en esta época de "vacaciones" es cuando me iba con ustedes a pasar unos días y vaya que lo pasaba feliz, me llenaba de plenitud el alma. Conocerlos, amarlos pero sobre todo, ser parte de su legado. Hace unos días, fue la fecha que implicaría tu cumpleaños "Día grande" siempre decías y si, era un gran día pues no cumplía años cualquier ser, cumplía años el jefe, el "mero mero", el que junto con Emma logró consolidar un grupo de personas que hoy lloramos tu ausencia. Cuantas cosas por decir y enumerar sobre tu bellísimo ser y es que brillabas por donde estuvieras, tu sonrisa, tu energía, tu inteligencia y austucia pero sobre todas las cualidades existentes, nada como tu "inocencia" podían decir lo que fuera de ti pero nadie, absolutamente nadie con tu humildad, tu trasparencia y tu sencillez. Vaya que lo eras, sencillo hasta la entraña y es que eras tan facilmente feliz. Desgraciadamente después de ese septiembre si cambió algo en ti y ya no fuiste tan feliz como sabías serlo, la muerte de Laura mató algo en ti  así como en mi, puedo decirte que me mató la mitad de mi ser pero aún así, siempre tuviste la sonrísa para regalar y la fuerza para amar a los demás. Yo no, yo me sumergí en un abismo de profunda melancolía y me fui tan lejos como pude de todos, me autoexilié y aquí sigo, en un exilio que cada día se vuelve menos finito. Pero desde acá observo y nunca dejé de estar (lo sabes) no como hubiese querido pero mi incapacidad de relacionarme con los demás me mantiene a la distancia.

Hoy te dedico lo único bueno que tengo la certeza hago bien, hoy te dedico estas letras porque sé cuanto te emocionaba la fecha de tu nacimiento y bueno, hoy felicito a cada uno de tus hijos y nietos porque  ahora cada uno de nosotros cumplimos un año más de haber tenido el privilegio de contener tu sangre en nuestro ser, tenemos el privilegio de haber sido testigos de una existencia única, por tanto, ¡salud Papá Arturo! cada tequila que beba por el resto de mis días ( serán bastantes) serán en tu honor.