domingo, 9 de noviembre de 2008

Funeral de flores


Hoy han fallecido las flores que adornaron mi hogar durante la semana. Muchas veces creemos que es así y ya. Sin embargo, con ellas se fue la ilusión, el nervio, la emoción y la encogida de panza que implicó el tenerlas en casa. Fueron unas flores de color lila; ¿la flor? no sé sólo sé que son como las que uno dibuja de niño y que así de bellas y permeadas de inocencia eran mis flores.
La muerte de una flor es tan triste como cualquier muerte pues es difícil pensar en una flor idéntica pues no sólo por la forma o el tono sino por el sentido que le depositamos y el simbolismo que adquieren mientras permanecen en nuestro hogar. Sin duda, han sido importantes, no han sido existencias desapercibidas ni sin importancia sino todo lo contrario, son existencias efímeras que con su belleza se hacen eternas en la memoria de nosotros los humanos quienes necesitamos que de modo constante nos recuerden lo que es una sencilla labor como la de admirar, amar y procurar una bella flor. 
Gracias museólogo por recordarme que la belleza se encuentra incluso entre la ventana de mi sala, su cortina y su bella vista hacia las nubes de algodón que te has comido. 

1 comentario:

Unknown dijo...

http://gallery.me.com/gaytan.ariza#100280/P1160328