domingo, 17 de agosto de 2008

Un ratito de amor


Es increíble, hoy no desperté por campanadas eclesiásticas. Es tan acogedor estar en familia.
Me encuentro en mi bella ciudad, el Distrito Federal, tan caótico, contaminado e inseguro. Sin embargo, no hay mejor lugar para mi en estos momentos, pues siempre he creído que no hay mejor lugar que en el que se nació, No hay mejor comida que la que te hacen con amor, y no hay mejor cobijo que el que te da la familia.
Si, a eso vine, a obtener mi dosis de amor y paz familiar; bendita Pacha Mama que me otorgó un seno en donde nacer, crecer y hacerme. Hoy a pesar del cólico garrafal que me cargo me siento tan plena y satisfecha de mi vida que si pudiese llenaría de amor cada letra y signo de este pequeño texto que me hace sentir paz.
Gracias, es lo único que puedo decir hoy. GRACIAS.

No hay comentarios: